Silvano
Aureoles arribó al municipio de Aporo cargado de propuestas, respondiendo así
a los señalamientos infundados que le dirigió el alcalde del lugar,
"voy a seguir gestionando por qué lo hago,para resolver las necesidades
de la gente".
Silvano se
comprometió a modernizar los talleres donde se trabaja la madera, traer
un paquete especial de apoyo para los pequeños empresarios del lugar,
construir en la cabecera municipal una estancia del adulto mayor y
fomentar el uso adecuado de los bosques con tecnología para que se
recupere y florezca la economía gracias a la riqueza de la región.
Dos
grandes proyectos llegaran a este municipio: Convertir a Aporo en
Pueblo Mágico para aprovechar a través del desarrollo turístico la
belleza de este lugar y arrancar el programa piloto de reforestación y
aprovechamiento forestal, mismo que posteriormente será aplicado en toda
la entidad.
Los asistentes al
evento coreaban porras y le manifestaron su agradecimiento por la
gestión realizada durante su periodo como diputado federal; a pesar de
que los trabajadores del ayuntamiento de este municipio fueron impedidos
de asistir al mitin mediante memorándums firmados por el alcalde, desde
el balcón de la presidencia municipal aplaudían las propuestas y la
presencia de Silvano Aureoles.