En México existe una manera particular de entender y dar sentido a la muerte. Diversas culturas prehispánicas consideraban que el destino del hombre es perecer y el culto a la muerte era un elemento básico de la religión de los antiguos mexicanos. En la actualidad, la celebración del Día de Muertos conserva mucha de aquella influencia.
Es una festividad significativa para honrar la memoria de los que fallecieron, la cual inicia en los últimos días de octubre y se prolonga hasta el dos de noviembre.
Ésta se practica a lo largo y ancho del país, participando en la misma, poblaciones indígenas y mestizas, tanto en áreas urbanas como rurales, con sus respectivas variaciones regionales.
Los rituales para rendir culto a los difuntos se llevan a cabo en dos días coincidiendo con las celebraciones católicas de Todos los Santos y Día de los Fieles Difuntos, el primero y dos de noviembre, respectivamente. El primer día se dedica a aquellos que murieron siendo niños, y el día dos a los muertos en edad adulta.
Con motivo del Día de Muertos, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), presenta una selección de datos estadísticos sobre la mortalidad en el país.
El monto de defunciones en cada entidad federativa depende del volumen de población, las entidades más pobladas concentran 41.8% del total de fallecimientos. Del total de defunciones en el país, el estado de México participa con 11.9%, el Distrito Federal 10%, Veracruz 7.7%, Jalisco 6.7% y Puebla con 5.5 por ciento.
La tasa bruta de mortalidad en 2008 es de 4.9 defunciones por cada mil habitantes. El indicador representa la relación entre las defunciones ocurridas en el año y la población media durante el mismo. Históricamente este valor ha tendido a disminuir, en 1970 fue de 9.7 y para 1990 de 5.6 fallecimientos por cada mil personas.
Por entidad federativa, Veracruz (5.8), Oaxaca (5.7), Michoacán y Guerrero (5.6 cada una), registraron las tasas de mortalidad más altas del país; mientras que Quintana Roo (3) la más baja.
La diabetes mellitus, tumores malignos, enfermedades isquémicas del corazón, enfermedades del hígado, enfermedades cerebrovasculares, enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores y los accidentes de transporte en conjunto, fueron causa del 56.2% de las defunciones ocurridas en 2007.
En general fallecen más hombres que mujeres. En 2007 se registraron 124.2 defunciones de hombres por cada 100 mujeres. Por grupos de edad, las diferencias por sexo son significativas, destacando el grupo de 15 a 29 años donde ocurrieron 264.9 defunciones de varones por cada 100 mujeres. En el cuadro se muestra el comportamiento por grupos de edad.
Es una festividad significativa para honrar la memoria de los que fallecieron, la cual inicia en los últimos días de octubre y se prolonga hasta el dos de noviembre.
Ésta se practica a lo largo y ancho del país, participando en la misma, poblaciones indígenas y mestizas, tanto en áreas urbanas como rurales, con sus respectivas variaciones regionales.
Los rituales para rendir culto a los difuntos se llevan a cabo en dos días coincidiendo con las celebraciones católicas de Todos los Santos y Día de los Fieles Difuntos, el primero y dos de noviembre, respectivamente. El primer día se dedica a aquellos que murieron siendo niños, y el día dos a los muertos en edad adulta.
Con motivo del Día de Muertos, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), presenta una selección de datos estadísticos sobre la mortalidad en el país.
El monto de defunciones en cada entidad federativa depende del volumen de población, las entidades más pobladas concentran 41.8% del total de fallecimientos. Del total de defunciones en el país, el estado de México participa con 11.9%, el Distrito Federal 10%, Veracruz 7.7%, Jalisco 6.7% y Puebla con 5.5 por ciento.
La tasa bruta de mortalidad en 2008 es de 4.9 defunciones por cada mil habitantes. El indicador representa la relación entre las defunciones ocurridas en el año y la población media durante el mismo. Históricamente este valor ha tendido a disminuir, en 1970 fue de 9.7 y para 1990 de 5.6 fallecimientos por cada mil personas.
Por entidad federativa, Veracruz (5.8), Oaxaca (5.7), Michoacán y Guerrero (5.6 cada una), registraron las tasas de mortalidad más altas del país; mientras que Quintana Roo (3) la más baja.
La diabetes mellitus, tumores malignos, enfermedades isquémicas del corazón, enfermedades del hígado, enfermedades cerebrovasculares, enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores y los accidentes de transporte en conjunto, fueron causa del 56.2% de las defunciones ocurridas en 2007.
En general fallecen más hombres que mujeres. En 2007 se registraron 124.2 defunciones de hombres por cada 100 mujeres. Por grupos de edad, las diferencias por sexo son significativas, destacando el grupo de 15 a 29 años donde ocurrieron 264.9 defunciones de varones por cada 100 mujeres. En el cuadro se muestra el comportamiento por grupos de edad.
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